El marcador se ajusta a lo sucedido en el campo del "Tahuichi", ya que ninguno merecía irse con las tres unidades por el mal juego realizado, pero mucho más por el cuadro local del cual se esperaba mucho más, pese a las ausencias que tenía.
Muy mal. Si se tenía la esperanza de que el partido iba a entrar en calor conforme pasaban los minutos, esto no pasó y en cambio fue tan soporífero que fueron contadas las opciones o las aproximaciones sobre los arcos.
A los diez minutos hubo el primer acercamiento de Blooming pero quedó en nada.
Luego a los 30' tras una internada de Flores, Carboni se pierde la opción para Universitario.
Y llegaron los goles. La U golpeó primero con una definición brillante de Palavicini y tres minutos después (36'), empató Bargas tras una gran habilitación de Joselito.
El resto fue para el olvido.
Más de lo mismo. No cambió, es decir no mejoró el partido tras el reinicio de la segunda parte.
Blooming cometía errores por doquier en todas las líneas, especialmente en la defensa y pese a que Universitario tampoco era gran cosa atacando.
Pese a ello llegó el gol casi de forma sorpresiva. Joselito levantó un centro pasado y en el otro sector Marcos Acosta que pone la cabeza, no la buscó, y la pelota que supera a Robledo.
Parecía que los celestes se llevaban el triunfo, pero era tan frágil todo que Universitario cuando se animó, llevó peligro y hasta que en otra grosera falla de Acosta, le dejó la pelota servida a Mansilla que no tuvo problemas para anotar. Después lo tuvo Bravo para la U y sobre el final, Robledo que le tapa otra a Bargas y el 2-2 se confirmó.